Trasladar al plano de la creación la fervorosa voluptuosidad con que, durante nuestra infancia, rompimos a pedradas todos los faroles del vecindario. O. G.

¿cómo nombrar con esa boca,
cómo nombrar en este mundo con esta sola boca en este mundo con esta sola boca?
Olga Orozco


mi mirada desde la alcantarilla

Y casi sin darnos cuenta
ya mirábamos
el cielo.


Y en el instante siguiente
empezábamos
a amarlo.


Como quien no quiere la cosa
supimos
asombrarnos

ante el mismísimo y fiel
papel de diario.


De golpe y sin intención
nos sabíamos
poderosos,
omnipotentes, cascabeles.



Sin saberlo ni soñarlo

nos creíamos
libres.


Caminando y caminando

nos acercábamos
al cielo.

Y de nubes grisáceas

se pobló
nuestra visión.


cuando inocentes felices

comenzamos
a desradicalizarnos

No hay comentarios:

Publicar un comentario

si tienes vos, tienes palabras. dejalas caer